6 vinagretas (y algo más) para alegrar tu ensalada

Poco a poco comienza a sentirse el calor y con ello las ensaladas van convirtiéndose en las protagonistas de las mesas. Se pueden hacer de las más variadas, pero sean los ingredientes que sean, hay un elemento clave e imprescindible para que queden realmente apetitosas: la vinagreta.

Es decir, siempre será una buena alternativa el aceite, la sal o el vinagre, pero existen buenas opciones para ir probando, mezclando y variando el sabor.

Vinagreta con frutos secos

Una buena opción debido a que llenará la ensalada de sabor y consistencia, es la vinagreta de frutos secos con 25 gramos de nueces y 25 gramos almendras, las que se machacarán en el mortero, para luego mezclarlas con sal, pimienta, 2 cucharadas soperas de vinagre y 6 de aceite de oliva.

Vinagreta de mostaza

Este aliño consiste de una cucharada sopera de mostaza, 4 de aceite de oliva y 2 de vinagre blanco, los que junto a la sal, se mezclaran en un bol hasta que se forme una mezcla espesa.

Vinagreta de mango

Esta vinagreta más exótica se hace con medio mango maduro pelado, el que se pondrá en un vaso para luego añadir 100 ml de aceite de oliva, 30 ml de vinagre de manzana y sal. Finalmente se bate.

Vinagreta de tomate

Con dos tomates duros se hará esta vinagreta, más un cebollín, 50 gramos de pepinillos en vinagre y sal, 50ml de vinagre de jerez y 250 ml de aceite de olvida. Todo mezclado se deja macerar por una noche.

Vinagreta de miel

Aquí vuelve la mostaza en una cucharada sopera, más otra de miel ligera. A esto se le suma una cucharadita de azúcar moreno, mezclándose todo con sal, 70 ml de aceite de oliva virgen y 10 ml de vinagre blanco, los que se deben haber mezclado con anterioridad.

Vinagreta de apio

Primero hay que cortar una rama de apio en trocitos pequeños. Estos en un bol se mezclarán con aceite de oliva y vinagre (unidos previamente), más pimienta y sal. Agregándole también medio tomate, medio cebollín y 5 pepinillos en vinagre.

Vinagreta de berenjenas

Se corta medio kilo de berenjenas en trozos y se guisan en vinagre, sal y dos dientes de ajo. Esto luego pasa a un bol con tres cucharadas de aceite de oliva y tres de vinagre. Se le añaden pequeños pedacitos de perejil y ajo, más cuadraditos de cebollas y tomate. Esto luego va al refrigerador por dos horas como mínimo.

También existen algunas más sencillas y rápidas de hacer:

• Vinagreta de ajo y miel a la que se le agrega aceite.
• Vinagreta clásica de limón con vinagre y aceite.
• Vinagreta de ajo y perejil picado más aceite.
• Vinagreta de yogurt descremado, vinagre y aceite.
• Vinagreta de hierbas picadas, aceite y limón exprimido.
• Vinagreta de cilantro picada, aceite y lima exprimida.

Así, ya se tiene una gran variedad de fórmulas para darle más vida a las ensaladas y así aprender a disfrutarlas realmente con cada sabor.